Solo un paseo (DEMETER)

Solía pasear con frecuencia por estas tierras llenas de cultura y arte, con todas esas costumbres, que mi pueblo y mi gente habían formado, y que se entremezclan con este paisaje inolvidable de aguas cristalinas y azules infinitos que perduran en la memoria de quien se acerca a conocerlas, no importa si es humano, vampiro o Dios, estas tierras parecen creadas por los Dioses para brindar paz y tranquilidad a los habitantes de la tierra.

Caminaba a la orilla del mar para despejar mi mente, pensando en las maravillas creadas por el gran Zeus mi padre, sonreía al pensar que en algún lugar del mar me observaba el gran Poseidon, mientras que Apolo me miraba desde el cielo...todos y cada uno de ellos con sus poderes ilimitados le brindaban a mi tierra su esplendor.

"GRACIAS POR TANTAS RIQUEZAS" grite viendo al horizonte esperando que los grandes Dioses del Olimpo me escuchasen

El jardín del olimpo lucia encantador, los capullos de rosas apenas entreabrían sus delicados pétalos dejando que su delicioso aroma se extendiera, habían muchas plantas y arboles creciendo, en las ultimas tardes había hecho que Atenea y Apolo me ayudaran a sembrarlas, sonreí tomando una rosa que se abrió por completo, hermosa y fresca ante el contacto de mi piel. - hermosa - le susurre para apartarme a otro sitio del jardín.

Dancé entre las flores y sentí curiosidad por los mortales, que hacían con la hermosa tierra que le habíamos regalado? mire desiertos donde un día hubieron lagos rebosantes de vida, selvas de concreto donde un día los arboles trinaron libremente, donde los ríos se perdían entre la espesura de la selva, donde el tigre y el oso eran los reyes, me enfurecí al ver también como los mortales entre ellos mismos despreciaban y maltrataban a los menos fuertes niños en su mayoría.

Sin duda Hades tiene mas poder que nunca - di un suspiro llevando mi mano a la cabeza , que dolor era ver que todo lo planeado estaba siendo destruido, donde estaba zeus? el que podía todo estaba ignorando a su creación, temí perder la esperanza en estos seres, tanto Mortales como los Dioses, dolor y mas dolor, era lo único que veía.

Pensaba retirarme a mis aposentos cuando una voz clamó a nuestra escucha ,"GRACIAS POR TANTAS RIQUEZAS" busque de donde provenía y sonreí, era un chico joven y apuesto, su apariencia me resulto conocida, si por supuesto, le conocía, él era Perseo, el hijo de mi hermano Zeus, desde mi sitio continué observando sus movimientos, se veía muy feliz, porque lo estaría? que motivos tendría un semi-dios para estar contento con lo que sucedía en la tierra? cuando había mas dolor y destrucción como mi hermano Hades me había hecho ver anteriormente con crueldad pero con sabia razón.

Continué mi camino absorto en mis pensamientos no puedo negar que soy feliz porque tengo vida y salud, aunque sabia bien que aunque mi tierra tuviera tantas riquezas, también tenía sus defectos, niños pasando hambre, muertes ya fuera por enfermedad o por deseo de los otros humanos, pero aun así es mi tierra y la amo como tal.

Mientras tenga vida luchare por ver mi tierra florecer y perdurar susurre mas para mi, aunque realmente deseaba que fuera escuchado por el gran Hades, quien debía ser muy infeliz en las tinieblas de su inframundo

Miré con interés a mi "sobrino" podía escuchar sus pensamientos, tenia vida, salud y era un semi-dios por lo tanto no podía morir por causas naturales en los mortales, eso podía hacer feliz a cualquiera de los suyos, aunque existían otras especies de mortales eternos, criaturas aborrecibles desde algunos puntos de vista, para nosotros eran mortales sin mucha distinción.

Cual es tu motivo para luchar? - pregunté dejando que mi voz saliera al viento del este, viento que quizás llegaría hasta perseo, sonreí.

La tierra no necesitaba solo deseos, necesitaba acciones, acciones que realmente le salvara.

Perseo, Perseo - le llamé haciendo surgir ante él una rosa de belleza inigualable y a su lado a escasos centímetros un cactus llenó de espinas -

Elije- dejé que mi voz volviera a recorrer el viento que susurraba en sus oídos, que escogería? la hermosa y aromática rosa? o el espinoso y de curioso aspecto cactus?

Continúe caminando cuando de pronto la escuche... una voz tan bella que podría hipnotizar a los mortales Cual es tu motivo para luchar? decía...mi motivo para luchar es ver a mi gente feliz, ver a mi gente vivir tranquila, ese es mi motivo para luchar conteste sonriendo.

Seguí caminando cuando vi aparecer ante mi una flor de belleza inigualable y a los pocos centímetros un cactus "elige" me susurraba el viento, acaricie la flor y sonreí, pero mi elección estaba tomada, tome el cactus sin importarme las heridas y sonreí

Elijo el cactus bella voz susurre aunque sabia que el viento llevaría mi voz hasta sus oídos

Escuche su primer respuesta -"mi motivo para luchar es ver a mi gente feliz, ver a mi gente vivir tranquila, ese es mi motivo para luchar" - muy buena respuesta, pensé sonriendo.

Mire atenta como acariciaba la rosa, el viento, las aves, el mar todo cayó para permitirle concentrarse en esa sola decisión, espere y sonreí al verle tomar el cactus.

Porque has tomado el cactus? - le pregunté

El viento llevo una vez mas su voz a mis oídos Porque has tomado el cactus? pregunto, me senté en la arena y suspire antes de contestar Mi dulce voz...hubiese sido muy fácil para mi, tomar esa bella flor con todo el esplendor que tu le has regalado, y dejar el cactus que tan solo a venido a crear heridas en mis humildes manos sonreí mirando mis manos antes de continuar sin embargo a pesar de las heridas y su falta de belleza antes los ojos del hombre...el cactus (nopal) aun con toda su fealdad viene a representar un beneficio para mi tierra y para mi gente, con todos esos poderes curativos que trae dentro, la belleza de la flor acabara, en uno o dos días, tal vez una semana, en cambio los beneficios de esta planta perduran por siglos, incluso cuando yo me haya convertido en polvo y descanse en paz lejos de esta tierra termine y volví a sonreír mirando el horizonte

Me levante de mi sitio y aparecí delante suyo seria, camine hasta estar cerca y me hinque tomando el nopal, lo abrí y tome sus manos, la salvia que surgió curo por completo las heridas en sus manos - No mas heridas- me levante y sonreí.

Has tomado una decisión muy sabia, cualquier otro mortal hubiera tomado la rosa, tu no caíste en el encantamiento que puse en ella, atrayente, hermosa, viva, el nopal es fuente de salud, es alimento y posee muchas mas propiedades, no es muy hermoso y su piel sin duda lastima hasta la mas resistente y curtida piel de los mortales, pocos ven mas allá de su extraña apariencia, pero tu lo has hecho.

Sonreí nuevamente y mire el horizonte, dentro de poco el sol abandonaría el firmamento - Sabio eres sin duda, perseo , hijo digno de Zeus- le mire nuevamente.

Mis ojos se maravillaron ante su presencia divina, el contacto de sus manos con las mías lleno de paz mi vida y al verla sanar mis heridas sonreí ampliamente muchas gracias bella Diosa Demeter susurre y me puse de rodillas ante ella y continúe hablando con la cabeza fija en la arena, a pesar de ser hijo del gran Zeus no consideraba que alguien como yo fuese digno de mirar su glorioso rostro Gracias por curar las heridas de estas humildes manos trabajadoras

Le sonreí - Alza el rostro hijo de Zeus y Danae - le ordene sin permitir que en mi voz se escuchara el tono del mandato.

Las heridas fueron fruto de la prueba que te puse, la haz pasado, no era justo que permanecieran interponiéndose con tu trabajo - sonrei - luchas por tu gente? porque lo haces? a muchos no le importan los demas, por que tu lo haces? , responde Perseo, yo escucho

La mire a los ojos permitiendo que mi mirada se perdiera en la profundidad de la suya Mi bella Demeter, el hijo del hombre lucha por su pueblo , por la felicidad y bienestar de los suyos, yo que aunque procedo de una humilde mortal he sido bendecido con la oportunidad de ser hijo de un Dios debo luchar aun mas, para que las maravillas creadas por ustedes florezcan y entonces si las futuras generaciones descendientes de los hombres puedan disfrutar de ellas

Perseo era mas justo que muchos de nuestros hijos, dioses todos, había sinceridad en su respuesta, humildad, pude ver en sus ojos una llama, sonreí complacida - ]No permitas que la llama de ese amor que sientes muera, verdad hay en tus palabras, la sabiduría no te ha abandonado a pesar de estar rodeado de ...simples mortales-

A pesar de todo él no había sido contaminado por los pensamientos mortales, o quizás si... decidí ponerle otra prueba antes de marchar. - Que deseas Perseo?

su pregunta me había tomado por sorpresa, acaso no lo había dicho ya? deseo paz para mi gente bella Demeter, deseo que el mundo conozca la tranquilidad que ya ha perdido, que le ha sido arrebatada poco a poco por el hijo del hombre mismo no podía pedir nada mas, tenía todo lo que necesitaba amor y salud

Lamentablemente no puedo concederte eso, para que exista un equilibrio no puede haber paz - sonreí - Me complace escucharte nuevamente Perseo, pero lo que pides solo los mortales pueden alcanzarlo por si mismos, no hay nada que los dioses podamos hacer, les hemos dado todo para que la paz reine, pero lo han pisoteado y escupido sin misericordia por ellos mismos, porque no entienden que se dañan ellos mismos, no por el deseo de un Dios enfurecido, son ellos mismos los que buscan su mal, los que labran su propio destino.

Antes tu tierra era fructífera, nada faltaba, pero la ambición del hombre es su mas grande perdición, siempre queriendo mas de lo que necesita, desperdiciando y destruyendo todo por saciar su deseo.

Las palabras de Demeter hacían eco en mis oídos, el hijo del hombre era su propio enemigo, en eso tenía razón, la ambición se había convertido en su perdición y al final tenía lo que merecía querida Demeter, soy consciente de los errores humanos, solo he contestado tu pregunta, que es lo que deseo? la paz para los míos, es todo sonreí a medias pues sabia bien que los Dioses no podrían otorgarme lo que yo deseaba para mi gente y los habitantes de la tierra

Tu alma es buena Perseo, muchas recompensas tendras por ello - sonrei, el sol se habia puesto ya y yo debia retornar al olimpo.

Espero seguir escuchando de ti Perseo, de tus hazañas, tus victorias pero sobre todo de tu buen corazon, no dudes de acudir a mi si necesitas ayuda.

Lo tendré presente mi señora sonreí e hice una reverencia, tal vez era momento de volver a casa y reflexionar tal vez pronto escuche de mi señora no estaba dispuesto a dejarme vencer tan fácil por las adversidades

Es lo que espero mi buen perseo - sonrei desapareciendo entre una nube de niebla, en el sitio que me habia encontrado dos semillas de olivo aparecieron.

Retorne al olimpo a mis tareas

La vi desaparecer entre la niebla y sonreí mirando al horizonte, donde sabia que sin duda estaría siendo observado

Tema finalizado.*.*.*.*.*.*.*.*.*.*